miércoles, 9 de marzo de 2011

Insurrección en los grandes almacenes

- ¡Troglo! – me dijo mi loro, Puto Bocazas, al tiempo que se bebía un cubata de quince litros (los loros pueden hablar y beber cubatas a la vez, son ventrílocuos) - ¿Has visto este libro de “La insurrección que viene”? Estaba en la Casa del Libro, 10 euros.
- Ya lo conozco. ¿No lo habrás comprado, Puto Bocazas? Me lo bajé de Internet hace mucho. ¡Uy, perdón, que no se puede decir internet! ¿O lo que no se podía decir era bajar? ¡Qué duda!
- ¿Comprarlo? Lo he mangado, obviamente.
- Ah, bueno. Una cosa es bajarse cosas de internet, pero robar no pasa nada.
- Me lo he leído y es un libro de lo más revolucionario e insurreccionista. Casi que vengo con ganas de tomar la Bastilla.
- Así es, Puto Bocazas. Allons enfants de la patrie, y demás familia.
- Pero aquí hay algo que no me cuadra, Troglo. Hasta insinúa que en Francia han detenido gente por tener ese libro.
- Sí, algo así. Acuérdate de la policia del pensamiento.
- No lo dudo pero, un libro tan la leche de antisistema, ¿y se vende en la Casa del Libro o en el Corte Inglés? Si escribes un libro revolucionario, un libro que sea una andanada al sistema, ¿lo haces en una edición guapetona y lo vendes a 10 euros en grandes superficies?
- Tal que suena paradójico, Puto Bocazas. Pero ya sabes que el capitalismo te vende hasta la soga para ahorcarle.
- No le busques tres pies al loro que no tiene sentido, Troglo. ¡Y no te bebas mi cubata! Si tu objetivo es difundir la insurrección lo regalas, lo repartes por la calle en fotocopias, lo distribuyes por Internet, o lo tiras desde un globo.
- ¿Te huele a insurrección para exquisitos, Puto Bocazas?
- Me huele a revolución de salón, Troglo, a camiseta del Che de Dolce&Gabanna, para progretas que buscan emociones prohibidas. ¡Ah, fíjate, me pueden detener por tener este libro, qué malo soy, qué emoción! Pero para mí que eso de ser antisistema es otra cosa. ¿Qué es ser antisistema, Troglo?
- ¿Qué es antisistema, Puto Bocazas? ¿Y tú me lo preguntas? Antisistema eres tú.
- Que no toques mi cubata.

8 comentarios:

Doctor Krapp dijo...

No es para contradecir a Puto Bocazas pero todas las revoluciones empezaron siendo revoluciones de salón. La francesa, por ejemplo, en los salones donde las madames reunían a los intelectuales ilustrados que conspiraban contra el absulutismo e incluso también tenían un libro, un señor y enorme libro, La Enciclopedia, a la que podían acceder muy pocos. Tampoco creas que Marx o Lenin desconocían esos ambientes aunque el primero prefería una buena biblioteca y el segundo los cafés suizos.

jesus dijo...

una revolucion bien puede fraguarse en un salon. lo curioso es que las revoluciones y sus simbolos lo pasen a ser de salon (sí, el che, la lengua de los stones y demas).
ya ves el gobierno se toma la molestia de bajar el limite de velocidad de autopistas como un gesto ahorrador pero no tendria huevos a reducir el horario de lso grandes centros comerciales (y su brutal gasto energetico). las grandes cadenas, franquicias, multinacionales... sustentan el poder. el libro que te puedan vender solo es un guiño trasgresor.
venga ese cubata y que siga todo dando vueltas. aun no es el momento.

Hector Aguilera S. dijo...

Comparto con Krapp que las revoluciones muchas de ellas han nacido en los salones. Acá en Chile, la llamada "Revolución en Libertad", la inciaron personas como Altamirano, Henriquez, Allende y otros, todos ellos eran de clase social acomodada de familias con tradición.
Saludos,

Esther dijo...

Pon fecha, sitio y hora y empecemos de una la revolución! De momento me voy a tomar unos cubatas con Puto Bocazas. Y charlaremos largo y tendido.

Besicos.

Troglo Jones dijo...

Saludos:

Doc, no iban por ahí los tiros. Claro que hay revoluciones que se fraguan en cenáculos y salones, o en las que participan burgueses o intelectuales, que muchos grandes revolucionarios lo fueron. Por donde voy es por la banalización o comercialización del tema. Como tú dices, conspiraban, no vendían sus ideas en el Corte Inglés. Aunque una obra contenga determinadas ideaas, el medio de distribución te puede hacer sospechar. Todos somos contradictorios, pero hay contradicciones excesivas.

Jesús, pues eso. Te permiten ese pequeño desahogo, que parezca que, pero no. Para liarla y para un cubata, siempre es buen momento.

Héctor, cierto, como le dije al Doc. Si hasta Kropotkin era príncipe. Pero si lo que dice Kropotkin lo patrocina el Santander, yo me mosqueo.

Esther, je, je, la revolución se hace todos los días. Cuidado con el loro, que es un exaltado. Y hace bien, qué coño.

Abrazotes.

Armando dijo...

Está candente la situación mundial, Troglo. Un par de cubatas con el PB nos viene bien a todos, pero siempre alerta.

Abrazos.

Ralph dijo...

Tenemos que estar entretenidos en algo, si no nos empezaremos a quejar de la cruda realidad, además si de paso se hace caja mejor que mejor ;) Que aprenda el Mandarín y publique su infinita fuente de saber, asi si que se hará de oro y podrá llegar al mandarinato supremo.

Troglo Jones dijo...

Saludetes:

Armando, el cubata es inseparable de la revolución. Se llama cubalibre por algo, je, je. Siempre ojo avizor.

Ralph, así es, se saca provecho de todo, y así los niños pueden jugar al rebeldote, je, je.

Abrazos varios.