En esto iba un día Jimmy Giuffré por la calle. Andaba un poco deprimido, porque todos tenemos malos días. Y, de repente, se encontró tirada en el suelo una botella de whisky de garrafón. La cogió, para que nadie se tropezase con ella, y se dio cuenta de que había algo dentro. Así que destapó la botella, que llevaba un corcho y, ante su asombro, salió de la misma un genio, que tenía por cierto forma de loro y llevaba turbante:
- ¿Qué pasa, Jimmy? – dijo el genio – Soy el genio Puto Bocazas. Gracias por sacarme de la botella, me metí para beberme el whisky y algún graciosillo la tapó, ¡grrrr!. Ya sabes que, por haberme sacado, el sindicato me exige que te conceda tres deseos, pero como estoy de oferta, te voy a dar cuatro.
- ¿Y puedo pedir lo que quiera? – dijo, tontamente, Jimmy Giuffré.
- Tú pide por esa boca, resalao – le dijo el genio.
- Pues quiero tener toneladas de pasta.
- Vale – aceptó el genio.
- Y quiero ligar como un loco.
- Perfecto – dijo de nuevo el genio en forma de loro.
- Además, quiero ser poderoso que te pasas.
- Ok – dijo de nuevo el genio.
- Y, por último - dijo Jimmy Giuffré – quiero escribir una canción que se recuerde siempre.
- Pues listo, ya tenemos cuatro. Aquí tienes – dijo el lorigenio sacándose un sobre de debajo del ala – en este sobre van tus cuatro deseos. Ahora me piro, que tengo la ropa en la lavadora. A seguir bien, Jimmy.
Jimmy Giuffré abrió el sobre con manos temblorosas de emoción, y entonces comprendió que el loro era un fullero de impresión, pues esto era lo que ponía en el papel que había dentro:
“Jimmy, capullo, si yo pudiera conceder riquezas a tutiplén, y poder abrumador, y pudiera otorgar la capacidad de atraer al sexo opuesto, ¿crees que te las iba a dar a ti? ¡Me las quedaría yo, tontaina! Así que el único deseo que te voy a conceder es el cuarto, pero te lo tienes que currar tú”.
Como podéis imaginar, Jimmy Giuffré, se enfadó bastante, y se estuvo acordando durante toda su vida de la familia del loro vacilón y de los cuatro deseos. Pero al final, el genio loro tenía razón, porque conmemorando lo de los cuatro deseos tituló uno de sus temas “Four Brothers”. Y se recordó siempre, siempre. Además, hizo feliz con su música a mucha gente, lo cual es un gran poder. Y también pudo dedicarse a lo que más le gustaba y vivir de ello, que es como ser rico, pero mejor. Lo de ligar no sé que tal lo llevaría, pero es que no se puede tener todo, hombre.
- ¿Qué pasa, Jimmy? – dijo el genio – Soy el genio Puto Bocazas. Gracias por sacarme de la botella, me metí para beberme el whisky y algún graciosillo la tapó, ¡grrrr!. Ya sabes que, por haberme sacado, el sindicato me exige que te conceda tres deseos, pero como estoy de oferta, te voy a dar cuatro.
- ¿Y puedo pedir lo que quiera? – dijo, tontamente, Jimmy Giuffré.
- Tú pide por esa boca, resalao – le dijo el genio.
- Pues quiero tener toneladas de pasta.
- Vale – aceptó el genio.
- Y quiero ligar como un loco.
- Perfecto – dijo de nuevo el genio en forma de loro.
- Además, quiero ser poderoso que te pasas.
- Ok – dijo de nuevo el genio.
- Y, por último - dijo Jimmy Giuffré – quiero escribir una canción que se recuerde siempre.
- Pues listo, ya tenemos cuatro. Aquí tienes – dijo el lorigenio sacándose un sobre de debajo del ala – en este sobre van tus cuatro deseos. Ahora me piro, que tengo la ropa en la lavadora. A seguir bien, Jimmy.
Jimmy Giuffré abrió el sobre con manos temblorosas de emoción, y entonces comprendió que el loro era un fullero de impresión, pues esto era lo que ponía en el papel que había dentro:
“Jimmy, capullo, si yo pudiera conceder riquezas a tutiplén, y poder abrumador, y pudiera otorgar la capacidad de atraer al sexo opuesto, ¿crees que te las iba a dar a ti? ¡Me las quedaría yo, tontaina! Así que el único deseo que te voy a conceder es el cuarto, pero te lo tienes que currar tú”.
Como podéis imaginar, Jimmy Giuffré, se enfadó bastante, y se estuvo acordando durante toda su vida de la familia del loro vacilón y de los cuatro deseos. Pero al final, el genio loro tenía razón, porque conmemorando lo de los cuatro deseos tituló uno de sus temas “Four Brothers”. Y se recordó siempre, siempre. Además, hizo feliz con su música a mucha gente, lo cual es un gran poder. Y también pudo dedicarse a lo que más le gustaba y vivir de ello, que es como ser rico, pero mejor. Lo de ligar no sé que tal lo llevaría, pero es que no se puede tener todo, hombre.
PD: Dedicado a la memoria de Jimmy Giuffré, 1921-2008. Aquí podéis ver una bonita foto de los famosos “Jimmy Giuffré 3”, con Jim Hall a la guitarra y el bajista Ralph Peña (¡qué tieso está el tío, yo creo que para que no se le arrugue el traje, que le cae muy bien!). Por cierto, Sr. Erradizo, Ralph murió muy joven, por si quiere investigar. El disco es de Fresh Sound, y la foto es de Ray Avery, creo que en un estudio de televisión.
12 comentarios:
Qué pillín es el lorigenio. Y buena moraleja, o sea hay que "currárselo", nada de pedir deseos geniales.
Bonito homenaje y cuento precioso. Jimmy Giuffre es una de las grandes figuras del jazz moderno. En la fotografía de Avery toca el saxo tenor, aunque él destacó como clarinetista. El grandísimo Jim Hall! Y, en efecto, qué gran porte el de Ralph con su traje impecable. Muy buena fotografía, perfecta!
Qué gran blog el tuyo, es magnífico! Imprime todas las historias, no las pierdes, porque algún día harás un libro.
besos!
Troglo, el día que yo me muera quiero que tu redactes la necrológica, la esquela y el epitafio :D
Hola:
Esther, muchas gracias, siempre animando, je, je. Para foto buena la que has puesto de Dee Dee Bridgewater.
Ojalá un día podamos hacer un libro. Tú pones fotos y yo chorradas.
Mr.Blogger, no digas esas cosas, hombre. Si estás hecho un chaval.
Gracias por vuestras visitas y vuestros ánimos.
Me encantaría publicar un libro. Me imagino tus relatos, introducción y comentarios de Sebastián, y mis fotos. Hacer un libro entre los tres. Todo muy elegido y seleccionado, buscar la excelencia, por supuesto. Poco, pero muy bueno.
No es ninguna tontería. Si tu amiga Pannonnica ha publicado sus fotos de polaroid, nosotros podemos hacer un gran libro, te lo aseguro. Piénsalo.
Yo conozco un editor que se llama P. B.
Jo con el P. Bocazas, está en todos los lados. ¡Uy! ¡Me ha venido un flash! ¡Yo creo que he soñado con él! Si es que hasta osa meterse en mis sueños. Átale con una cadenita Troglo, haz el favor.
Bonita historia.
Si haceis un libro ya teneis compradora ;-).
Saludos chicos!
Hola de nuevo:
Esther, por mi parte me encantaría meterme en un proyecto así. Lo planteamos seriamente cuando queráis. Pero no te fies de ese tal P.B., que te despluma, ja, ja.
Mamen, tienes razón, en la próxima historia no le voy a sacar, por listo. Ten cuidado, que este es como Freddy Kruger.
Que digo yo que nos compres el libro antes de hacerlo, ja, ja. Es la fórmula habitual cuando se tiene mucha cara.
Besos.
Ay, ay, amigo Troglo (perdón por lo de amigo, que suena a Bush) eso le ocurre por leer demasiado en blogs ajenos acerca de sueños y deseos.
Que sí, que hay que currárselo.
Por cierto, si Esther se pone, yo quiero uno de esos libros, pero firmado.
Buen homenaje, sí señor. La idea de Esther de publicar un libro poliédrico es estupenda, hacedlo por favor. Pero estoy de acuerdo con Troglo, cuidado con los editores que los hay muy chungos.
Salud a todos
Espero no interrumpir este post. Soy muy curiosa, acabo de ver el argumento de tus dos películas favoritas, incluida la que te da vergüenza reconocerlo. Y las voy a "bajar" o alquilar.
Saludos:
Vengo de un sarao de los mios, que más que una conferencia parecía una misa soul, todos cantando y dando saltos. En fin, ya os la contaré algún día.
Hola, Félix. No te digo amigo Félix, porque suena a canción de Enrique y Ana, pero lo pienso. Ya matizaré eso de que hay que currárselo, que os lo estáis tomando muy a pecho. Y los firmados valen doble, Félix.
A ver cuando vamos a tirarle piedras a las ventanas al Sr.Erradizo.
Jazz Ceuta, me alegro verte por aquí. Un libro poliédrico es incómodo, yo lo haría rectangular, como todos. Perdona la idiotez, creo que estoy borracho de la conferencia. De todas maneras, yo haría el libro aunque no me lo publicaran, fijate.
Esther, ¿ásí que cambiando de tema? Bueno, estoy orgulloso de "En un lugar solitario" (y qué bonito es el lugar donde vive el Janfri). Parece cine negro, y es un drama romántico de aupa. Actor y actriz en estado de gracia. Obra maestra, maestrísima, al menos para mí.
¡No te bajes "Shall we dance?", es una película horrible! Pero todos tenemos algo malsano que nos gusta. Fíjate, Jennifer López, y Richard Gere (¿cómo vas a ser buen actor con esos ojos tan pequeños?). Igualito que Janfri y Gloria Grahame. No digas que no te avise.
Abrazos.
Yo tengo la duda si a muchos de los que ocupan puestos de responsabilidad no se les habrá aparecido el genio en un día generoso, porque la verdad por el duro trabajo como que no. O al igual fue un día que el genio empino el codo más de la cuenta, quien sabe.
Sí, Ralph, depende de lo que uno considere "duro trabajo", je,je. Pero es claro que muchas veces los méritos del personaje como que no casan con su posición. Pasa mucho por aquí que, el que no tiene padrino, no se bautiza.
Un abrazo.
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