miércoles, 6 de febrero de 2008

La máquina del ritmo

Ha muerto el gran percusionista cubano Tata Güines. Desde aquí un homenaje a este músico autodidacta, línea directa del gran Chano Pozo, que tocó con Cachao, Chico O’Farril, Mario Bauzá, etc. Yo tengo algunos discos en los que aún puedo disfrutar de su arte, con Jane Bunnett, “Maraca” Valle, o con Bebo y Cigala en el celebérrimo “Lágrimas Negras”.

En esta foto aparece con sombrero y sonrisa en la tumbadora con el grupo de Cachao. Para interesados, magnífica fuente la Diaz-Ayala Cuban and Latin American Popular Music Collection http://gislab.fiu.edu/smc/

El mundo tiene hoy un poco menos de ritmo.

2 comentarios:

Esther dijo...

Me da mucha pena que este percusionista ya no esté. Como tu dices, hay menos ritmo en el mundo y menos gente estupenda. Porque tiene cara de buena persona y de ser magnífico.

Me gusta muchísimo la fotografía, qué colores, qué sabores, que sonidos, qué ritmo, qué marcha, qué sonrisas, están todos estupendos. Atrás el de la trompeta está lleno de vida y alegría, el del contrabajo es genial apoyado en la silla. Se respira ganas de vivir, ganas de ser feliz, ganas de inundar el mundo de alegría. Se respira genialidad!

Un abrazo amigo troglo jones.

Troglo Jones dijo...

Qué bonito comentario. Este sí que es un buen homenaje.

Muchas gracias, Esther.