jueves, 26 de marzo de 2009

Cuentos de los mandarines: la lengua de los mandarines

El mandarín Ku Ñao, glorioso entre los gloriosos, dormitaba en su despacho tras habérsele ido su aristocrática mano con el licor amarillo. Soñaba el mandarín con billetes de todos los colores y denominaciones, con clientes incautos y con trabajadores sumisos, cuando apareció en su despacho su discípulo Par Di Yo.


- Maestro, ruego vuestro permiso para...¡Maestro! ¡MAESTROO!

- ¡Eh! ¡Ah! ¿Qué pasa, los mongoles? ¿Eres tú, Par Di Yo, gorila del loto? ¡Grrr! Estaba descansando la vista un momento, je, je, ya sabes, las presiones del cargo de mandarín.

- Claro, Maestro, claro.

- ¡Aaggh! Tengo la boca pastosa cual aliento de dragón. Y, por cierto, ¿qué cuernos de elefante blanco te traen a mi augusta presencia, sapo de los lagos?

- Maestro, he venido a rogaros que me enseñéis la lengua de los mandarines, ya que mi lento cerebro la encuentra demasiado compleja.

- ¡Ah, la lengua de los mandarines! ¡El esperanto de los consultores! ¡El swahili del management! ¡La lingua franca empresarial!

- Todo eso, Maestro. Cuando oigo hablar a los consultores, me parece tan compleja que se me pone la coleta de punta. No entiendo nada, todo me parece una sucesión de absurdos.

- Par Di Yo, eres un Ce-Po-Rro. Si te parece una sucesión de absurdos es porque lo es. Y, sin embargo, no existe un idioma más sencillo.

- ¿Es posible, Maestro?

- Atiende, búfalo perezoso. Aunque los grandes mandarines utilizamos muchas más, la lengua de los mandarines básica sólo consta de diez palabras.

- Me asombráis, Maestro – dijo Par Di Yo, mientras apuntaba furibundamente.

- Son conocidos como Los Diez Sagrados Fa-La-Bros. Anota, son estos: Competencia, Matricial, Desarrollo, Estructura, Resultados, Optimizar, Comunicación, Sistema, Objetivos y Dinámica. Con ellos ya puedes hablar mandarinés, y volver Ta-Rum-Ba a cualquier cliente.

- ¿Cómo es esto, Maestro? ¿Solo con los Diez Fa-La-Bros?

- Dirás Sagrados Fa-La-Bros, To-Ci-No irrespetuoso. Escucha, porque cada uno de los Fa-La-Bros puede usarse como sustantivo, adjetivo o verbo. “Sistema” puede usarse también como “Sistematizar” y como “Sistémico”. ¿Lo Pi-Yas?

- Lo Pi-Yo, Maestro. “Dinámica” puede ser sustantivo o adjetivo, y también “Dinamizar”.

- Bien, Par Di Yo, cuando quieres eres menos Le-lo de lo que pareces. Además, los Fa-La-Bros pueden ser combinados en cualquier orden y sin límite. Y con esto hablas mandarinés. Veamos un ejemplo. Si yo quiero empezar a volver loco a un cliente, le diré: “podemos optimizar los resultados desarrollando la comunicación”. Sigue tú, Par Di Yo.

- Er...”Gracias a este desarrollo dinamizaremos la estructura”.

- Perfecto, Par Di Yo. Sigo. “Claro, sistematizaremos una estructura matricial que optimice el desarrollo de competencias”. Ahora tú, Par Di Yo.

- Um, “Y a su vez los objetivos se estructurarán a lo largo y ancho de todo el sistema de forma mucho más dinámica”.

- ¡De Lu-Jo, Par Di Yo! ¿Ves lo fácil que es? Ya conoces la lengua secreta de los mandarines. Ahora, sólo tienes que ir añadiéndole algunas palabras más y el límite sólo lo pone tu imaginación.

- Pero, Maestro – dijo Par Di Yo mientras se rascaba la cabeza – todo lo que hemos estado diciendo no es más que una sarta de disparates. No significa realmente nada.

- Esa es la belleza del asunto, Par Di Yo, hormiga de la miel. Como decía el malvado sabio occidental Goebbels, nosotros no hablamos para comunicar nada, nosotros hablamos para producir un determinado efecto. En nuestro caso, conseguir que el aturdido cliente firme el contrato, je, je, je.

- Ya veo, Maestro. La honestidad es nuestro lema.

- ¿Eh? Menos vaciladitas, Par Di Yo, engendro irreverente. Y ahora retírate, que noto de nuevo la vista cansada y tengo que relajarla un poco. ¡Umm! ¡Jj! ¡Zzz!

- Oigo y obedezco, Maestro.


Y así fue como Par Di Yo aprendió la lengua secreta de los mandarines. Y como aquel día los escribas estaban con resaca, pues llegaron tarde y no pudieron recoger estas enseñanzas en los versos de rigor. Una lastima.

11 comentarios:

Armando dijo...

Conozco a uno que maneja un lenguaje conocido, solo que es muy purista, Troglo. je je.

Saludos

Esther dijo...

Sigue enseñándonos Troglo, que aquí aprendemos rápido. Con que Fa-La-Bros, eh? Bien, bien, los anoto todos y memorizo. Y luego los meteré por aquí y por allá.

Por ejemplo: Que usted tenga un dinámico y optimo día con resultados matriciales conseguidos!

Mola?

Troglo Jones dijo...

Saludos:

Armando, ¿así que te relacionas con mandarines, je, je? Ten cuidado con la cartera.

Esther, ya veo que aquí el que no corre, vuela. Hay que practicar mucho, hasta que uno sea capaz de hablar dos horas y no decir nada. Voy a optimizar mi estructura sistémica con unos cubatas, a ver si me dinamizo, je, je.

Abrazos.

Lienzo tierra dijo...

Jejeje la escena primera me ha recordado a mi propia empresa, entrando al despacho de mi jefe que estaba roque sobre la mesa, yo intentando no hacer ruido para no despertar a la fiera porque de verdad, que calladito está más guapo, pero na, no fui lo suficientemente sigilosa y ya tuvo el hombre que disimular como que buscaba algo bajo la mesa y eso.

Oye esto no lo leerán tus clientes no???

Bsos! ;-) ;-)

Troglo Jones dijo...

Mamen, yo tuve uno que se sobaba sin ningún pudor, hasta roncaba, y no cerraba la puerta del despacho. Un campeón.

Los clientes también tienen lo suyo, no te creas. Hay de todo, pero hay cada uno que hay que cogerlo con pinzas. Algún día me meteré con ellos, je, je. Seguro que les gusta si lo leen.

Abrazos.

ángel de cristal dijo...

Saltando, aaltando desde el blog de pruebameblogger he visto este blog y he decidido dejarte un comentario y proponerte que visites mi blog.

¿Me puedo quedar aquí a leerte y a comentarte?

Saludos

Troglo Jones dijo...

Claro, Chica de Cristal, sin problema. Bienvenida. Pero no puedo prometerte visitar mucho tu blog, tengo ya muy poco tiempo, y tengo muuuchos pendientes.

Saludos.

Ralph dijo...

Troglo eres un crack cuando otros venden el método de las cien palabras tu vas y nos presentas el de las diez palabras, estás que te sales. Saludos.

Troglo Jones dijo...

¿Has visto, Ralph? ¿Para qué cien? Yo creo que incluso valdría con dos o tres, je, je. Una táctica secreta es que también te puedes inventar palabras si las necesitas. Lenguaje improvisado, como el jazz.

Abrazos.

Mr Blogger dijo...

Es que los escribas fueron a escribir las estrofas de la poesía con solo 10 palabras y se atragantaron de mala manera...

Troglo Jones dijo...

Para mí que no se atragantaron de estrofas, Mr.Blogger, más bien de garrafas, je, je.

Saludos.