viernes, 31 de diciembre de 2010

El año en que recuperamos la sobriedad


- ¡Puto Bocazas! – le dije a mi loro, llamado Puto Bocazas en homenaje a su inoportuna verborrea - ¿Quieres ayudarme con los langostinos de una vez? ¿Qué haces? ¿No será un disparate de los tuyos? ¿Qué es eso?
- Troglo, este es el invento definitivo. ¡He inventado el desgarrafonador!
- Eso no me suena bien, Puto Bocazas.
- Verás, Troglo, se me ha acabado la paciencia con la cantidad de burradas que hay en el mundo y ver que la gente no hace casi nada. Así que voy a liarla, pero bien. Esta noche, cuando den las doce, pondré en marcha el desgarrafonador.
- ¿Y qué es lo que hace?
- Hasta un mastuerzo como tú lo entenderá, Troglo. El desgarrafonador libera antigarrafones subatómicos, que se esparcen por toda la superficie de la tierra. Cuando los antigarrafones entran en contacto con garrafones, se creará un agujero negro alcohólico. En resumen, el cacharro lo que hace es afectar a las bebidas alcohólicas, de forma que pierden su poder cogorzoso. Aunque la gente beba como cosacos, no les afectará. Estarán tan sobrios como al principio.
- ¿Quieres decir que será imposible atufarse por mucho que uno beba?
- Exacto, Sherlock.
- ¡Pero eso es horrible, Puto Bocazas! ¡Nadie puede soportar un mundo como éste en estado sobrio!
- Ahí voy, Troglo. Al no poder emborracharse, la gente tendrá que ver el mundo tal y como es, y es imposible que puedan soportarlo. ¡Se rebelarán! ¡Los gobiernos no durarán ni diez minutos! ¡Preveo una revuelta de proporciones bíblicas! ¡Por fin me voy a cargar el sistema, je, je, je!
- ¡Je, je, je! Es una burrada tan grande que hasta puede funcionar. Marx debe estar verde de envidia en su tumba, Puto Bocazas. ¡Eres el amo del materialismo cogórzico!
- El mesías de la revolución etílica, diría yo, je, je.
- Voy preparando el kalashnikov para tenerlo a mano. Solo una duda me corroe, Puto Bocazas....
- Tranquilo, Troglo, que te veo venir. He colocado un escudo anti-antigarrafónico rodeando la casa, así que a nosotros no nos afectará. Vete sacando los cubatas, je, je, je.
- ¡Ese es mi loro!

Nos vemos en los disturbios. Feliz año nuevo, amiguetes.

martes, 28 de diciembre de 2010

Propósitos

- Oye, ¿tú llevas mucho esperando en esta oficina de empleo?
- ¡Puf! ¡Meses y meses! ¿Y tú?
- También. Yo es que, con lo mío, no lo tengo fácil.
- Ya. ¿Y...? ¡Espera! ¡Parece que ya sale!
- ¡Sí! ¡Vamos!

El burócrata de turno de la oficina de empleo se acercó hasta el centro de la habitación. La gente se arremolinó en torno a él.

- ¡A ver, señores, orden, por favor! ¡Hagan una fila! ¡Silencio, por favor! ¡Ejem, ejem! A ver, paso a leerles las necesidades de personal que tenemos este año para el puesto de “Propósitos de Año Nuevo”. A ver, lo primero que necesitamos, con urgencia, es “Adelgazar”. ¿Hay algún “Adelgazar” por aquí?
- ¡Yo, yo!
- Muy bien, pase a la mesa 4. Bueno, sigo. “Dejar de fumar”. ¿Algún “Dejar de fumar” presente?
- ¡Yo, yo, yo!
- ¡Mesa 4! ¡Sigo! ¿”Apuntarse al gimnasio”?
- ¡Joder! ¡Siempre lo mismo! ¡Esto está amañado!
- ¡Callense ya, hombre! ¡Sigo! ¿”Dedicar más tiempo a lo que me gusta”? ¿Alguno por ahí? Mesa 4.
- ¡Tongo, tongo!
- ¡Mantengan la calma o les desalojo, caramba! A ver, “Echarse novia”. ¿Usted? Mesa 4. ¡Señores, es todo lo que tenemos por hoy! Mañana seguiremos.

Y el burócrata regresó a su oficina, mientras el resto de propósitos en paro volvían a sus sitios arrastrando los pies.

- ¡Todos los años igual, coño! ¡Los mejores puestos siempre son para los mismos propósitos!
- Sí, así no hay manera. ¿Tú en qué propósito te licenciaste?
- Yo soy “Dejarse bigote”.
- ¡Uf! No está fácil. Claro, que yo soy “Ordenar el trastero”, no te digo nada.
- Bueno, no te preocupes, si al final el 31 de diciembre nos colocamos todos, mal que bien.
- Sí, eso es verdad. Pero lo que más me jode de este curro de propósito es la precariedad, macho. En mes y medio la gente ya nos ha olvidado y estamos otra vez en el paro.
- Sí. ¡Asco de vida!

domingo, 26 de diciembre de 2010

Filántropos

Ahora que estamos en Navidad, hablemos de filantropía. Cleptómano Pétrez es un filántropo, y se siente muy satisfecho de sí mismo. Ha dicho que, cuando palme, donará la gran mayoría de sus gromecientos mil millones a una fundación benéfica. No ha dicho como se va a articular eso, ni quién lo va a administrar, ni que va a hacer con ese dinero la fundación, pero bueno. Tampoco nadie se pregunta cómo es posible que Cleptómano tenga gromecientos mil millones. Yo no tengo un millón, pero pongamos que lo tuviera. ¿Es Cleptómano gromecientas mil veces más listo que yo? ¿Trabaja gromecientas mil horas más? Misterios de la multiplicación de los panes y los peces.

Lo curioso del caso es que Cleptómano no se ha acercado en su vida a la economía productiva, es un especulador. Compra y vende. Y me pregunto, todas esas especulaciones, todas esas compras y ventas, ¿a cuánta gente han dejado sin empleo? ¿A cuántas personas han emprobrecido? ¿Cuántas familias se han ido a la ruina para que él ganara gromecientos mil millones? Pero bueno, no jodamos, que la filantropía es muy bonita.

Cleptómanos hay muchos. Aquí hace mucho tiempo que conocemos al personaje. El poeta Iriarte lo bautizó Juan de Robres.

El señor don Juan de Robres,
con caridad sin igual,
hizo este santo hospital,
pero antes hizo a los pobres.

Tengo una Navidad un tanto tal que así, iros preparando.

viernes, 24 de diciembre de 2010

Los regalos navideños


- ¡Troglo! – dijo mi loro, Puto Bocazas - ¡Este año he inventado el regalo perfecto!
- Miedo me da oírlo, Puto Bocazas. ¿Qué es? Parece una especie de pistola futurista.
- Ahora verás, je, je. Pon ahí todos los regalos que me has hecho.
- ¡Eh! ¡Todavía no los puedes abrir!
- No me hace falta, tú colócalos ahí. Muy bien, ahora pongo en marcha el cacharro, lo apunto hacia allá, y...

¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZARRACLÁS!

- ¿Qué rayos es eso, Puto Bocazas? ¡Has volatilizado los regalos!
- Ahí le has dao, Troglo. Son rayos. ¡He inventado un infalible detector de regalos mierdosos! Tú apuntas el cacharro y él detecta, sin necesidad de abrir el paquete, si el regalo es una mierda o no. Y en caso de ser un regalo mierdoso, genera automáticamente un rayo descuajeringante que lo desintegra. ¡Imagina la de tiempo que ahorras desempaquetando!
- Sí que parece práctico. ¿Vale también para cumpleaños?
- Cumpleaños, bodas, aniversarios, lo que se tercie. Pero no disimules, Troglo. Acabo de demostrar que, un año más, todos tus regalos eran mierdosos a más no poder.
- ¡Oye, mis regalos eran....!
- ¿Esos clásicos y mierdosos calcetines, quizás?
- Ejem...
- ¿Y una mierdosa camisetita interior para no pasar frío? ¿Puede ser?
- Glub...
- El detector nunca falla, Troglo. Ahora ninguna mierda que regales a nadie le pillará de sorpresa. Aprovecho para decirte que eres un rata, y que espero una compensación.
- Ejem...yo...¡Pero espera un momento! ¡Déjame el cacharro! ¡Vamos a aplicárselo a los regalos que tú me has hecho a mí!
- ¡Eh! ¡Espera, que tú no lo sabes manejar!

¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZARRACLÁS!

- ¡No ha dejado ni rastro! Puto Bocazas, mucho quejarte, pero tus regalos eran tan mierdosos como los míos.
- ¡Mis regalos eran muy prácticos!
- ¿Mierdosa bufandita de las que hacen pelotillas, tal vez?
- Estooo....
- ¿Hermosa y mierdosa corbata verde botella?
- Está bien, Troglo. Estamos empatados a mierdosidades.
- Este detector tuyo no se yo si va muy bien para la armonía familiar, Puto Bocazas.
- Pero el mejor preservador de la armonía familiar ya está inventado, Troglo. Se llama güisqui. ¡Hala, vamos a empezar ya con los cubatas, que ya es hora! ¡Un brindis por los regalos mierdosos!
- ¡Salud!

Y felices fiestas.

miércoles, 22 de diciembre de 2010

La madre

¡RIIING! ¡RIIING!

- ¿Sí? ¿Dígame?
- ¿Mamá? ¡Mamá, soy yo! ¡Mamá, que me han cogido!
- ¿Qué me dices, hijo?
- ¡Sí, sí, ya soy desgraciado! ¡Indefinido, además!
- ¡Qué alegría, hijo, qué alegría! ¡Ay, vamos a ver si nos dura! ¡Pórtate bien, hijo, y haz todo lo que te diga el director de operaciones!
- ¡Sí, mamá, sí!
- ¡Qué bien, hijo! ¿Y qué te pagan, una mierda?
- Sí, mamá, sí, una mierda.
- Bueno, hijo, pero no hay que ser ambicioso al principio. Ahorrando seguro que consigues ser miserable, y luego ya veremos.
- Claro que sí, mamá.
- Pues eso, hijo. Tú éstate calladito, y si te tienes que quedar a hacer unas horas pues no pasa nada. Que no están los tiempos para ir de listo.
- Lo sé, mamá. No te preocupes.
- Pues enhorabuena, hijo. ¡Qué bien! ¡Y…! ¡Y…!
- ¿Mamá? ¿Estás ahí, mamá?
- Hijo…
- ¿Sí?
- ¡Hijo, que no, que no me hagas caso! ¡Mándalos a la mierda, hijo!
- Mamá, ¿qué dices?
- ¡Que te rebeles, hijo! ¡Que no seas cabestro! ¡Vive, escapa, por dios! ¡Que no parí un esclavo!
- ¡Gracias, mami!

domingo, 19 de diciembre de 2010

Publicidad

¿Cansado de esos libracos que le cuentan como ser un director exitoso en tres días? ¿De cursos de liderazgo y mariconadas varias que no le sirven para nada? ¿De verdad quiere dejar de ser un inútil y convertirse en un manager del siglo XIX, perdón, XXI?

¡No busque más! ¡Ha encontrado lo que necesita!

THE EMBUDATION MANAGEMENT. Sí, ha oído bien. THE EMBUDATION MANAGEMENT. Con este sistema, usted se convertirá en un experto en manejar la ley del embudo en su entorno empresarial. Aprenda a cargar el muerto siempre a otros y a quedarse con todas las medallas. Sepa como hacer que lo que para usted son “circunstancias”, para los demás sean “¡excusas!”. Escuche, escuche el testimonio verídico de don Pormisco Jones, anteriormente capullo y hoy manager de éxito:

“Desde que lo uso, esto es cojonudo”

Así es, sienta usted también la satisfacción de que se jodan los demás. Y además, carguese de razón aunque no la tenga con nuestro regalo adicional al comprar THE EMBUDATION MANAGEMENT.

¡Nuestro audiocurso de MANIPULATING!

En entrañable formato casette, y con todos los grandes éxitos del embudador-manipulador: “Por tu culpa, culpita”, “Así es la vida”, “Eres un irresponsable”, “El pico de trabajo”, “Eso es que te organizas mal”, “Reloj, no marques las horas”, y tantos otros grandes títulos que le harán saltar los lagrimones a cualquier proyecto de gran empresario.

¡Aproveche! ¡Regalelo para Navidad! ¡Compre, compre! ¡Compre ya!

¡COMPRE YA, COJONES!

miércoles, 15 de diciembre de 2010

El adivino

¡Señor! ¡Señora!

¿Quiere saber su futuro? ¡Lo ve todo! ¡Lo sabe todo!

Por una moneda. Consulte el futuro a EL ECONOMISTA.

¡No acierta jamás! ¡Lo que predice hoy es lo contrario de lo que predijo ayer! Pero seguimos haciéndole caso.

domingo, 12 de diciembre de 2010

Razones para votar a una lavadora

Tenía que saber si los rumores sobre las maquinaciones de mi loro, Puto Bocazas, eran ciertos, así que dije:

- ¡Puto Bocazas!
- ¿Qué tripa se te ha roto, Troglo?
- ¿Es cierto eso de que en las próximas elecciones generales piensas presentar como candidato a la lavadora?
- Así es, ya estoy preparando su campaña.
- ¿Crees que tiene posibilidades?
- ¿Tú has visto los rivales que tiene? Está chupado.
- ¿Y cuál es su programa electoral?
- ¿Por qué sólo uno, Troglo? Eso está anticuado, hombre, ¿no has oído hablar de la muerte de las ideologías? La lavadora es flexible, tiene programas para todos los gustos: de color, delicado, blanco,…Como ves, no podemos fallar, tenemos un programa para cada votante.
- Pero no sé yo si daría la talla en un debate electoral.
- ¿Estás de broma? En esos debates no se dice nada, el truco es hablar continuamente y más alto que el otro. La ponemos a centrifugar y listo, a ver quién supera eso.
- La verdad que una lavadora centrifugando acojona lo suyo.
- Ya te digo, es de lo más convincente. Además, le digas lo que le digas no se altera, sigue dando la matraca.
- Como la lavadora no piensa, imagino que cuando llegara a presidente, tú estarías detrás manejando los hilos.
- ¡Claro! Igual que pasa con los candidatos humanos. ¿O es que no son títeres?
- Touché, Puto Bocazas. ¿Y no sería más fácil que te presentaras tú directamente?
- No seas burro, Troglo. Para empezar, los loros tenemos una reputación inmerecida, por lo que la gente no nos votaría. ¿Tú votarías al Botín si se presenta a las elecciones? Sin embargo, sabes que es el que manda. Además, si las cosas se ponen feas, alguien tiene que recibir las tortas, y prefiero que sea la lavadora. Es mucho mejor estar detrás, mandas igual, pero no se te ve, je, je. Oye, te propongo algo. ¿Por qué no presentamos también al candidato de la “oposición”? Así, gane quien gane, pillamos seguro. ¿Qué te parece el frigorífico?
- Me gusta. Tiene buena planta, y transmite frescura, je, je.
- Esto está hecho, Troglo. Cuando lleguemos a la Moncloa, me pido la litera de arriba, je, je, je.

miércoles, 8 de diciembre de 2010

La fábrica de desgraciados

- Buenas noches, señoras y señores. Soy Chelufo Costrón, y un día más les saludo desde éste, su programa televisivo de divulgación, “Cosas que a usted no le importan un huevo”. En nuestra serie de documentales, hemos querido acercarnos en esta ocasión a un sector de la economía española que se mantiene boyante a pesar de las circunstancias económicas conocidas por todos. Este sector es, como quizá hayan adivinado, el de la producción de desgraciados. De hecho, nos encontramos en el despacho de Jodón Perrerías, director de operaciones de la empresa “Cabronio & Jopútido”, una de las mayores productoras de desgraciados de nuestro país. Buenas noches, señor Perrerías, y gracias por recibirnos.
- El placer es mío, Chelufo.
- Señor Perrerías, ¿podría explicarnos cuáles son los secretos de su éxito? ¿Qué es lo que hace a “Cabronio & Jopútido” un líder en la producción de desgraciados?
- Je, je, bueno, Chelufo, yo creo que la clave está en la dedicación y la especialización. Cierto que las empresas españolas son grandes productoras de desgraciados pero, para la mayoría de ellas, la desgracia en un subproducto de su actividad principal. Algunas consiguen buenos resultados, es cierto, pero la nuestra es la primera empresa en especializarse en desgraciados como producción única.
- ¿Y en qué consiste concretamente la producción de desgraciados, señor Perrerías?
- Básicamente, el proceso consiste en joder la vida de tus empleados de forma que se conviertan en desgraciados lo más rápidamente posible. Hay muchas formas de conseguir esto, claro está, pero en “Cabronio & Jopútido” hemos conseguido hacer de este proceso un arte, modestia aparte. Personas que parecían inasequibles a la desesperación han sido convertidas en unos desgraciados en pocos meses gracias a nuestras técnicas.
- Impresionante.
- Ya lo creo. Y no es porque lo diga yo, observe las caras de asco y desesperación de nuestro personal. No todas las empresas consiguen esto. Además, nuestros desgraciados están garantizados. Aunque se marchen a otra empresa, siguen siendo unos desgraciados, la desgracia ya se les ha quedado dentro. Por supuesto, la garantía no puede cubrir eventualidades como que se hicieran conscientes de su propia esclavitud e hicieran algo para cambiar su vida, pero esto es extremadamente raro.
- Además, tengo entendido que su empresa también tiene muy en cuenta la calidad.
- Efectivamente, Chelufo. No sólo nos centramos en la productividad, sino que nuestros desgraciados lo son cada año más. Este año, esperamos alcanzar niveles dickensianos de desgracia.
- Parece que estamos, entonces, ante un sector en expansión.
- Definitivamente. Nuestro grupo está realizando un gran esfuerzo de inversión para incrementar la producción de desgraciados. Nuestro crecimiento es, y toco madera, imparable. Además, piense que el desgraciado es un bien de utilidad pública, ya que se convierte en una persona dócil, apática y pasota. Por eso entendemos, y aprovecho para decirlo en directo, que el gobierno debería subvencionar su producción.
- Muy bien, señor Perrerías, pues dicho queda. Muchas gracias por su tiempo, y le deseamos los mayores éxitos en el futuro.
- Gracias a vosotros, Chelufo. Ha sido un placer. Y ahora me voy a trabajar, que los desgraciados no se hacen sólos, je, je. ¡López! ¿Por qué está tan derecho en la silla? ¡Encórvese más! ¡Más! Y usted, Boniatez, el nuevo...¿a qué huele? ¿Será posible? ¿Es autoestima lo que huelo? ¡Pase a mi despacho, que esto lo vamos a arreglar rapidito!

lunes, 6 de diciembre de 2010

Portadas que me gustan


¡Caramba! ¿Cómo se me habrá colado aquí esta portada? No sé qué, pero tiene algo que me gusta, je, je. Disco del 56, la foto la hizo Peter Gowland, y la portada la diseñó Chuck Hyman. Acompañan a esos mujeriegos de Art Pepper y Chet Baker, Phil Urso al saxo tenor, Carl Perkins al piano, Curtis Counce al bajo y Lawrence Marable a la batería. Casi toda la música del disco es de Jimmy Heath, y esto no es una excepción, “For Minors Only”, aunque para menores, no sé yo. ¿Seré mayor?

sábado, 4 de diciembre de 2010

Güisquileaks

Mi loro, Puto Bocazas, ha conseguido echarle mano a una documentación confidencial y secreta. La colgamos aquí hasta que se den cuenta y nos cierren el chiringo:

EL CONCEPTO DE EMPLEO DE MIERDA Y SU IMPORTANCIA EN EL DESARROLLO ECONÓMICO DE LA SOCIEDAD

Madrid, 4 de diciembre de 2010

Dirección General de Empleo de Mierda.

El objetivo de éste informe es definir claramente el concepto económico del empleo de mierda y las estrategias que, a juicio de esta Dirección General, deberían llevarse a cabo para su fomento.

Por empleo de mierda nos referimos en el contexto de este informe a los puestos de trabajo mal pagados, sin seguridad alguna, y donde no son necesarios conocimientos o habilidades complejas para su desempeño.

Es clara la importancia creciente que el empleo de mierda ha tomado en una sociedad globalizada. El número y la variedad de empleos de mierda ha crecido de forma exponencial durante las últimas decadas, y es esta una tendencia que tiene todos los visos de continuar. El empleo de mierda se hará cada vez más necesario y más diversificado. Así, estimamos necesario que desde las instituciones se facilite su desarrollo a través de varias vías de acción:

1. El incremento del conformismo en la sociedad: para una correcta evolución de las tasas de empleo de mierda, se hace necesario que la sociedad no tenga los suficientes redaños para quejarse de nada. Aunque más adelante se analizarán en mayor detalle, las tácticas concretas para conseguir este objetivo, se resumirán en: más fútbol, más televisión, aumento de las tasas de acojonamiento con el programa “No te quejes o será peor” (Anexo 1.b), reducción y/o eliminación de cualquier forma de actividad sindical honesta, subvención y/o promoción de cualquier forma de actividad sindical corrupta, y erradicación de cualquier forma de asociacionismo civil no controlado.

2. La reforma del mercado de trabajo: Básicamente, las medidas a tomar en esta área consisten en reducir y eliminar progresivamente todos los derechos laborales existentes hasta ahora. Para la realización del punto 2 es necesario haber desarrollado en buena medida las acciones propuestas en el punto 1. Se apelará, además, a la necesidad de “apretarse el cinturón” en tiempos de crisis. Al ser una medida sensible, se deberá repetir una y otra vez, como un mantra, la necesidad de llevarla a cabo y las consecuencias apocalípticas de no hacerlo, hasta que la sociedad perciba su realización como inevitable.

3. Reducción de la inversión en educación y formación: Al ser el empleo de mierda por definición un tipo de trabajo de baja cualificación, no se necesitará una cantidad elevada de mano de obra cualificada. Esto permitirá reducir el defícit público, por medio del recorte de las inversiones en educación. Resumiendo la situación, no se necesitan grandes conocimientos para un empleo de mierda, por lo que se puede destinar parte de esta partida presupuestaria a otros menesteres como…

Y aquí se acaba bruscamente el informe, porque el resto del papel lo usó Puto Bocazas para envolver un bocadillo de güisqui, que se iba de excursión. Ahora que me fijo bien, tampoco es tan secreta la información.

miércoles, 1 de diciembre de 2010

Despierta

Hematocrito Vargas, vendedor de seguros, despertó por la mañana al sonido del despertador, ¡bzzzzzz! Con los ojos llenitos de sueño, se levantó, se rascó el culo, se dirigió con pasos vacilantes a la cocina y se preparó una infusión. Mientras la sorbía perezosamente y se iba despertando, un pensamiento empezó a tomar forma en su sesera:

- Son las siete de la mañana. ¿Cómo puede uno levantarse a las siete de la mañana para ir a vender seguros? ¿Hay algo más absurdo? No tiene sentido. ¿Para eso tenemos alma, si es que la tenemos, para levantarnos a las siete a vender seguros? ¿Para eso nos creo Dios, si lo hizo? Lo que el hombre ha creado es esperpento. Vivimos en un sistema tan incoherente, tan abracadabrante, que es imposible no morirse de risa, o de pena, o de absurdo. ¿Por qué tenemos la capacidad de hacernos preguntas si hemos de vivir en un mundo así de loco?

Entonces, Hematocrito se dio cuenta de que estaba teniendo un ataque de amarga lucidez. Alarmado, miró el paquete y se dio cuenta que, por error, se había tomado una infusión de plumas de loro. Tiró el líquido que quedaba y, con un enorme esfuerzo de voluntad, fue rápidamente a tomarse el único antidoto conocido en estos casos: media horita de televisión. Por suerte, llegó a tiempo, la enfermedad no había avanzado mucho, y volvió a ser un hombre de provecho.