Bueno, aquí va otra portada del amigo David Stone Martin, con su estética tan característica. Y es que no siempre va a ser Reid Miles, hombre. Esta es para el “Jam Session”, disco a nombre de Charlie Parker del año 52. ¡Hala, a ver quién es capaz de identificar a los músicos que salen caricaturizados ahí, y que son los que participan en la sesión, sin mirar los créditos! Por eso utilizo la portada del volumen 2, que la del 1 es igual, pero salen los nombres. Algunos son fáciles, otros casi imposibles. Venga, una foto de la sesión para echaros un cable. Lo siento, pero no sé de quién es la foto, por eso no acredito.
Lo malo es que, al ser una jam, los temas son larguísimos, y cuesta dios y ayuda subirlos. En fin, prueba superada, ahí va este “What is this thing called love”, casi 16 minutazos del clasico de Cole Porter. A ver si, además de físicamente, los identificamos auditivamente, je, je.
7 comentarios:
Ay te van algunos, Troglo: Ray Brown al fondo con su bajo, los saxos Benny Carter y Ben Wesbster, a la guitarra Barney Kessel y Oscar Peterson al piano.
Saludos
Muy bien, Armando, eres un monstruo, je, je. Imagino que tampoco se te ha pasado la estilizada figura de Charlie en su traje claro, je, je. Ahí está Ray Brown, al fondo de la portada y de la foto, siempre elegante, corbata y camisa blanca bien planchada. El hombre de gafas (y camisa imposible) es Barney Kessel. Ensombrerados en la foto, ocupan la misma posición en la portada (como todos, de hecho) Oscar Peterson y Ben Webster. Y sí, el pequeño gran Benny Carter, fondo a la izquierda, según se mira.
Eso sí, has dejado los más complicados, a ver ahora.
Abrazotes.
Las portadas de jazz del amigo Stone Martin son una verdadera delicia. ¿Sabes que sus obras se han expuesto en el Metropolitan Museum, el Museum of Modern Art y la Public Library de Nueva York? Merece estar allí. A ver si vamos a Nueva York que allí está todo! O casi.
En otras ocasiones ya he hablado brevemente de su carrera extraordinaria. Sobre esta cubierta, decir que es una de las mejores. Me encantan esos retratos psicológicos de Brown, Carter, Webster, el amigo Charlie, Kessel... y demás extraordinarios músicos, están muy conseguidas. Se respira jazz por los cuatro costados. Qué individualidades, madre mía. Qué grandes personalidades. Nunca tendrán homenajes suficientes.
El que está fumando sentado no es Johnny Hodges?
Un abrazo, Troglo!
Jelou, Esther:
Qué envidia me das, por el Metropolitan y todos esos sitios, y si está Stone Martin, ya el colmo, je, je. Sí, era un gran artista.
Como dices, lo que hace son retratos psicológicos, capta la esencia del músico. Y es precisamente magnífica su interpretación de ese Johnny Hodges que has detectado rápidamente (vaya grupo de saxos, Parker, Carter, Webster, Hodges y...falta uno, je, je). Y es que las poses de Hodges son muy características, ese sombrero sobre la rodilla, el brazo sobre la pierna de su compadre Webster, el cigarrillo, y esos ojos que capta de manera increible la portada de David.
Besotes.
Troglo, los músicos de este álbum son: Charlie Shavers, Benny Carter, Johnny Hodges, Flip Phillips, Ben Webster, Osacr Peterson, Barney Kessel, Ray Brown y J.C.Heard.
Un álbum notable tanto el 1 como el 2.
Un cordial saludo.
Acabo de llegar de viaje y me metes en un enigma de difícil solución. Viendo solo el dibujo puedo identificar a Bird con seguridad y confundí al tipo del sombrero con Hawkins porque por ahí tiene una imagen parecida. Los ojos de Webster son para no olvidarlos tan siquiera en un dibujo y Ray Brown, al que tú citas, está lo suficientemente escondido como para pillarlo.
Saludos:
Héctor, ¿ya de vuelta de vacaciones? Le has chafado el misterio al Doctor Krapp, amigo. Faltaban los más chungos, el saxo Philips, detrás de Barney, el trompeta Shavers, el bajito entre Barney y Bird, y el batería J.C., sentadito al fondo. Te iba a poner buena nota, pero tengo sospechas de que has copiado. Oye, y te has dejado a Charlie Parker.
Doc, espero que haya sido buen viaje. ¿No habrá sido lisérgico? Lo digo por lo de confundir a Hawkins con un sombrero, je, je. Aunque yo suelo confundir al loro con Winston Churchill. Sí, los ojos de Ben son inconfundibles.
Abrazos.
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